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¿Te has propuesto comer de forma más saludable y no sabes por dónde empezar? Te presentamos una herramienta que puede ayudarte a preparar comidas equilibradas y saludables.

Se trata del método del plato, una herramienta visual pensada para comer de forma sana y equilibrada cubriendo las necesidades nutricionales de cada comida elaborada por expertos en nutrición de la Universidad Harvard en el año 2014. Sea en una comida servida en plato o para llevarla de fiambrera, este método remarca que seguir una dieta basada en vegetales, grasas saludables, cereales integrales y proteínas reduce el riesgo de padecer diversas enfermedades crónicas y aumento de peso a largo plazo.

 

¿En qué consiste el método del plato?

En el caso de las personas con un estilo de vida activo y con un peso saludable, se establecen unas porciones con unas necesidades energéticas de nivel medio. Se trata de dividir el plato de las comidas principales (comidas y cenas) de la siguiente manera:

• ½ del plato debe estar compuesto por frutas y verduras (sean crudos en forma de ensalada o bien hervidos, salteados, o triturados en forma de puré). Recuerda que las patatas no cuentan como verduras.
• ¼ del plato debe estar constituido por cereales integrales como el trigo integral, la cebada, la quinoa, la avena, el arroz y los derivados de estos ingredientes como la pasta.
• ¼ del plato restante, debe estar compuesto por alimentos proteicos: como los huevos, el pescado o la carne blanca, las legumbres, los frutos secos naturales u opciones vegetarianas como el tofu, el seitán o el tempeh. Limita las carnes rojas y evita las carnes procesadas y el embutido.

Si lo prefieres, puedes repartir los tipos de alimentos con el menú clásico de primer y segundo plato con guarnición. El método del plato sólo establece la proporción de cada grupo de alimentos, pero no se refiere a las cantidades: adapta la cantidad de comida a tu hambre y necesidades energéticas del día.

Para cocinar y aliñar, es recomendable que utilices aceite de oliva virgen extra. Para el postre preferiblemente elige una pieza de fruta fresca. Te ayudará a completar la ingesta de energía proveniente de los hidratos de carbono y contribuirá a cubrir la ingesta de vitaminas. Los días que comas legumbres, de postre escoge mejor yogur; facilitarás una digestión sin flatulencias. Y completa la alimentación diaria con un desayuno y merienda adecuados.

Recuerda que mantenerse activo es también importante para mantener un peso adecuado.